martes, 4 de octubre de 2016

No creo en palabras

A veces las palabras son mas hirientes que un simple golpe; Aunque muchas veces que tenemos una discusión con alguien, sea quien sea, queremos arreglarlo en ese momento, no se según mi opinión si es que sería lo mejor, por que lo que normalmente pasa en esos momentos es que lo que soltemos, serán las palabras mas hirientes por naturaleza, por que queremos tener una autodefensa, pero son esos cinco segundos en donde soltamos las palabras pero luego que pasó ese momento nos damos cuenta de lo que hicimos, de lo que dijimos, por que vemos el resultado en la mirada de la otra persona, o en lo que haga, que quizás puede ser, responder a nuestras palabras o también quizás quedarse callada(o) y a veces las palabras son tan fuertes, que realmente herimos sentimientos y pues lo que vemos luego, son lagrimas caer por sus mejillas, las cuales aunque no queramos aceptarlo, son por nuestra culpa por que aunque después digas: lo siento, perdón, no fue mi intensión... En esa parte la psicología del ser humano es complicada y masoquista por así decirlo, por que aunque no lo crean, hagamos un simple experimento y rápido, piensen en el momento más molesto con su mejor amigo o con sus padres, y puedo asegurar que ese recuerdo vendrá a su mente y lo peor es que recordarán las palabras mas hirientes y quizás ni siquiera recuerdes el "por que" de la pelea o discusión, pero es que es así, la mente suele recordar lo peor, lo que quiere, lo selecciona, pero lamentablemente selecciona muchas veces lo peor, y no por que quiera, sino por que en ese momento nos sentimos lo suficientemente mal como para que nuestro cerebro recuerde ese sentimiento y el por qué nos sentimos así en ese momento.

El título se presta en este caso para ambos casos, por que no creo en palabras, por buenas o malas que suenen, por que tenemos que aceptarlo pero la mayoría de palabras que decimos es de acuerdo a nuestro estado de ánimo de ese momento, sea feliz, triste o molesto.

Antes de responder, recuerden que tenemos un cerebro el cuál nos puede ayudar a soltar la respuesta precisa y real para el momento.